Dominga, una niña de nueve años, junto a su madre y su abuela han sido desplazadas de una playa en el Pacífico colombiano y ahora viven en la ciudad. Triste, suele cantar, para viajar con su imaginación al mar, donde el recuerdo de su padre la espera. Una aventura en bicicleta es su única opción y la compañía de su amigo Luis y su abuelita, con quienes emprende un descabellado viaje de retorno, para volver a escuchar el Susurro del mar.